Así que sacúdanse ese pesimismo y saquen de ese archivero todas esas empolvadas ideas que para muchos parecían “locuras”, “sueños guajiros”, etc., y vuelvan a soñar, a desear que se hagan realidad.

¡Pero esperen!, no todo es tan sencillo como simplemente soñarlo ya que para que un sueño se vuelva realidad, hay que aplicar el segundo paso del éxito llamado: ACCIÓN



Acción significa movimiento y es sinónimo de hacer, así que no solo sueñes que las cosas se hagan realidad...¡HAZLAS REALIDAD!.



Recuerdo a una amiga que caminaba de un lado a otro de su oficina dándose pequeños golpecitos en la frente y al llegar me dijo: Pablo quiero aumentar mis ventas, a lo que yo respondí: ¿si camino contigo y me doy golpecitos en la frente, tú crees que podamos incrementarlas por lo menos un 30%? Se detuvo, me miró fijamente y me dijo ¿a qué viene eso? Y yo le contesté que la única acción que yo veía en ese momento para abordar el problema era caminar y darse golpecitos en la frente, así que estaba asumiendo que ese era una de sus primeras acciones estratégicas, por lo que en seguida me respondió que estaba pre-ocupada y ahí entendí todo, mi amiga no sabía la diferencia entre OCUPARSE y PRE-OCUPARSE.



Señor(a) empresario(a), deje de pre-ocuparse por su empresa, por sus ventas, por su rotación de personal, por la calidad de su producto, por sus pasivos, por sus clientes y... ¡OCUPESE DE ELLOS!, este puede ser un buen momento para hacer realidad sus sueños ocupándose de ellos.



Ahora bien, ya se dio la oportunidad de pensar que hay cosas que parecen imposibles pero que usted quiere, desea, que se hagan realidad, ya decidió ocuparse de ello, sin embargo vayamos al tercer factor del éxito llamado: DETERMINACIÓN.



Si dividimos la palabra determinación, encontraremos un significado que va más allá de lo que realmente sabemos de ella, veamos: DE-TERMINACIÓN, ¡correcto!, ¡acertó!, determinación significa TIEMPO, tiempo de iniciar y tiempo de terminar, es decir su sueño se verá realizado en el momento en que usted determine realizar la primera acción, en el momento en que le ponga fecha y hora.



Le invito a que tome una gran bocanada de aire, contenga la respiración y se decida ¡HOY MISMO! a dar ese pequeño paso, esa pequeña acción que usted sabe que es necesaria para realizar su sueño, pero que ha venido posponiendo, deje de buscar pretextos, “LO QUE HA DE HACER, HÁGALO DE UNA VEZ!



Muy bien creo que hasta aquí usted esta emocionado con lo que le he compartido (porque sigue leyendo, si no...¿qué caso tendría terminar el artículo?) y ya quiere poner manos a la obra, pero aún no tenemos el cuadro completo, nos falta una parte, un cuarto factor del éxito llamado: PERSEVERANCIA.



PERSEVERANCIA es sinónimo de resistencia, de disciplina.

Cuantas personas a punto de lograr su sueño desistieron, cuantas se quedaron en el camino por no resistir, la respuesta es...¡muchas!, esa es la gran diferencia entre el triunfador y el perdedor, uno aguanta, resiste....el otro....¡NO!

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Estimados lectores, sus grandes sueños, que comenzaron con las pequeñas acciones, programadas con tiempos específicos, solo se verán culminadas si ustedes perseveran, si resisten a los embates que el fracaso envía a todo momento para llevarlos a engrosar sus filas, así que vuelva a tomar aire, concéntrese en lo que ha soñado, continúe haciendo lo necesario en el tiempo que se requiere y no permita que el miedo o el exceso de confianza al estar a un paso de lograrlo lo detenga. Hágalo, así llueva, truene o relampaguee.

“Un sueño sin acción es fantasía, una fantasía sin tiempo es un cuento”

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